En las ciudades modernas, la cultura no sólo es un recurso para el ocio o el entretenimiento. Estoy convencido de que las diferentes artes juegan un papel dinámico y visible en la construcción de los espacios urbanos. Por eso, desde el Ayuntamiento de Almería, además de mantener activa una amplia oferta de espacios y propuestas, como los diferentes museos, el Centro de Interpretación o los refugios de la Guerra, estamos reactivando el tejido profesional de la cultura en esta crisis programando conciertos y exposiciones. Pero además, trabajamos permanentemente de la mano de administraciones como la Junta de Andalucía para que de ese intercambio de propuestas, ideas y datos surjan oportunidades de creación de empleo y riqueza para los almerienses. Quiero agradecer desde estas líneas el permanente compromiso de la consejera de Cultura, Patricia del Pozo, con Almería y sus escenarios culturales. Hace unos días, la Junta de Andalucía ha anunciado y puesto en marcha dos iniciativas muy positivas para este objetivo en nuestra capital, como son las esperadas obras de restauración y consolidación de la zona norte del conjunto monumental de la Alcazaba y la primera exposición de la temporada en el Centro Andaluz de Fotografía (CAF), titulada ‘Naturaleza y Medio Ambiente’ y que se realiza en colaboración con la Fundación Valentín de Madariaga. Son iniciativas que van a servir para consolidar y posicionar la oferta cultural de Almería dentro del conjunto de Andalucía y el resto de España y que demuestran que en la gestión política solo hay dos cosas: o inversiones o excusas. Y en Almería, en materia cultural, durante muchos años hemos tenido muy pocas inversiones y muchas excusas. Es justo, por tanto, valorar como se merece el anuncio de una inversión de más de 870.000 euros para asegurar y embellecer el lienzo norte de la Alcazaba, que es la parte menos visible, menos conocida y menos fotografiada del conjunto monumental, pero quizá la más necesitada. Se trata de una actuación muy esperada que hemos demandado los almerienses durante años y que ahora, por fin, se hace realidad. Mejorar la Alcazaba es apostar por Almería entera, pero de manera muy especial por su zona de influencia, que conecta historia y sentimientos en un eje común que une la fortaleza y sus murallas con el Cerro de San Cristóbal y la Plaza Vieja. Un entorno de interés y posibilidades de crecimiento único en España, que vamos a convertir en una zona de atracción turística y empresarial capaz de generar empleo y riqueza en nuestra ciudad y que nos va a hacer recuperar muchos años perdidos. Junto a eso, la nueva programación del CAF vuelve a situar a Almería como una referencia en el panorama de la creación y proyección artística en Andalucía, con todo el poso de valores y beneficios que ello deja en nuestra capital. La cultura, entendida como el lenguaje universal de la creatividad, hace dialogar, reflexionar y aporta cohesión al territorio. Todas estas propuestas y actuaciones amplían el horizonte de desarrollo de Almería y proyecta los factores que nos diferencian de otras ciudades otorgándonos un carácter único del que nos sentimos legítimamente orgullosos. Por lo tanto, creo que es muy importante que la sociedad almeriense perciba que cuando hay voluntad de hacer cosas, ni las distancias son tan insuperables, ni los medios constituyen un factor tan limitante.
