El Alcalde de León, Antonio Silván, estuvo días atrás en Almería compartiendo las claves del éxito de su ciudad y la de su marca, “Manjar de Reyes”, en la consecución del título de Capital Gastronómica de España en el presente año.

Entre muchas otras ventajas, la distinción de ser la ciudad representante de la gastronomía española en 2018 se está revelando para León como un revulsivo turístico de primer orden que, tan sólo en los cien primeros días ha reportado un retorno en impactos en medios y redes de más de siete millones de euros.

Creo que es un dato que nos debe estimular aún más para que entre todos podamos conseguir que Almería sea la Capital Gastronómica de España en 2019.

La verdad es que los almerienses llevamos toda la vida debatiendo sobre lo que somos o hemos sido y creo que ya va siendo hora de que orientemos esa discusión hacia algo mucho más productivo.

En Almería tenemos que pensar menos en lo que somos y pensar más en lo que podemos ser. Y en esa línea de pensamiento hay que situar el impulso colectivo que supone aspirar a que Almería sea Capital Gastronómica de España en 2019.

Almería debe asumir este reto desde la convicción de que es posible alcanzar el éxito porque, siendo realistas, Almería tiene los mejores ingredientes para lograrlo: unos productos naturales de excelente calidad, la ventaja de poder combinar la tierra y el mar y la seguridad de contar con un sector profesional de altísima cualificación. Pero eso, siendo mucho, no lo es todo.

Estamos aprendiendo de quienes antes que nosotros asumieron el reto, aceptaron el riesgo y salieron ganadores. Ciudades que apostaron por dejar de ser meras espectadoras del éxito ajeno y decidieron arriesgarse fuera de su zona de confort, asumiendo el reto de competir, de potenciar fortalezas y corregir debilidades.

Conseguir ganar con Almería 2019 sería un éxito colectivo que no pertenecería a nadie y que al mismo tiempo sería de todos, porque a todos nos beneficia que Almería entre en el mapa de las ciudades gastronómicas de uno de los países del mundo en donde mejor se come, para que de ese modo sumemos un atractivo más al catálogo de la oferta turística almeriense.

Para ello hemos contado desde el primer momento, y es justo reconocerlo, con el apoyo de los profesionales del sector hostelero almeriense. Y no sólo los hosteleros.

La verdad es que toda Almería se está volcando en este empeño. Y eso es algo fundamental que yo agradezco públicamente, porque queremos armar la candidatura de la mano de los que más saben. Y esa es siempre la mejor estrategia de futuro.